Apuntamos a un docente:

• Que conozca, respete los valores y tradiciones de la cultura judía y nacional.
• Con una actitud comprometida con lo institucional, tanto respecto a la filosofía educativa como del los vínculos que en ella se generan.
• Con una apertura a las propuestas y actividades  organizadas por la dirección y demás instancias.
• Con una actitud favorable para una tarea cooperativa, como integrante específico de un grupo de trabajo.
• Con predisposición para poner en práctiva las pautas internas de la escuela.
• Con conocimientos que le permitan hacer lecturas de la realidad en la que le toca desenvolverse.
• Con flexibilidad en función de una actitud de revisión permanente para innovar y anticipar situaciones.
• Como guía, orientador, acompañando a los alumnos a desarrollar sus potencialidades, respetando capacidades y tiempos individuales.
• Con conocimientos adecuados al área  curricular correspondiente.
• Con conocimientos  didácticos, metodológicos que le permitan guiar y acompañar los procesos de enseñanza, aprendizaje, planificación, orientación y evaluación, tanto  individual como grupal de sus alumnos.
•  Con el compromiso de capacitarse y actualizarse permanentemente , apuntando a la jerarquización y profesionalización del rol.